El año 2015 se celebró el 350 aniversario de unos tapices flamencos que el Obispo Don Andrés Bravo de Salamanca regaló a la catedral.
Ennegrecidos por el humo de las velas y el polvo de los siglos, han llegado milagrosamente intactos a nuestros días.
La Real Fábrica de Tapices restauró el año pasado la serie titulada “Las Alegorías de Palas Atenea”, y una explosión de luz y color se ha abierto a nuestros ojos.
Los tapices, gigantescos, se exponen en una sala gótica perfectamente iluminados con una luz cenital. Las orlas, con motivos frutales y florales, parecen tejidas en relieve, con un frescor que invita a tocarlos (cosa prohibida, por cierto).
Pero lo más sorprendente es la lección que nos da Palas Atenea, la diosa de la sabiduría. Nos dice que la paz promueve el bienestar de los Humanos.
En un mundo ajetreado de angustias y crisis económica, los tapices centenarios te enseñarán que para ser feliz hay que saber gozar de la paz y la armonía.
Cuando regreses a tu hogar, cuenta a tus amistades la lección de Palas Atenea, y recomiéndales que vean las maravillas de Sigüenza con sus ojos.
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